Etiqueta: la casita de las estrellas
Nuestra bici!
con todo lo necesario para hacerte uno a tu gusto,
#losmartesconCarlos; Orden en casa
Aunque parece el título de una sección de Ikea, esto hoy va de reflexiones y crianza… No es #martesconCarlos pero es que son los temas que me preocupan ahora, así que aprovecho el blog por si me dais consejillos o ideas que puedan ser útiles para estas cosas,
Leyendo sobre educar en ser ordenado veía el otro día que cuando los niños tienen sus juguetes ordenados y a la vista, por ejemplo, en una estanteria, como que se acostumbran a tenerlos así, les gusta que estén así bonitos y entonces tienden a dejarlos igual que los han encontrado, manteniendo el orden en la habitacion. Sobre todo en su periodo sensible del orden, de lo que hablaremos en otro momento.
No sé, me llama la atención, pero es cuestión de probar…
Por otro lado, pensando que eso era muy difícil, Carlos tiene en su habitación, igual que muchos niños, una bolsa grande (tipo baúl o cajas, etc.) donde se guardan todos los juguetes «al pelote»; Era fácil y rápido de recoger, él podía ayudar, y el cuarto siempre tendría buen aspecto.
Sin embargo, si lo piensas de verdad… ¿enseñarles a meter todo al pelote, por muy rápido que sea, y a sacarlos volcando el saco no es una manera de hacerlos potencialmente desordenados? (así meto yo la ropa en los armarios…a veces…)
Así que de momento, por si de verdad sirve de algo, le he puesto una estantería a Carlos, con la idea de que algunos juguetes, con los que más cuidado quiero que tenga, estuviesen ahí, a la vista, y él supiese dónde había que ponerlos:
Para ayudarle un poco más, a él y también a los demás, porque yo sé cómo estaban colocados pero no siempre soy yo la persona que está con él, pensé hacer una foto de cada estante ordenado, plastificarla y pegarla a la vista, igual que en cada cesta (una para los playmobil, otra para las pelotas y una grande para los «juguetes grandes no clasificados» 😉 como peluches, la mopa, el trineo y demás «varios») así que cuando está con @elhombremásguapodelmundo, con la chica que lo cuida por las tardes o con quien esté jugando en casa, todos sepan dónde va cada juguete.
Tampoco penséis que vivo en los mundos de Yupi, y sé que de vez en cuando tendré que entrar yo y volver a colocar todo, porque poco a poco se va desordenando, un día un tomate se queda fuera de la cesta de la comida, otro día se mezclan las herramientas con los colores, etc. Pero bueno, al menos intento que él asuma el orden como algo natural, y yo a vaces le veo progresos; #amordemadre…
También tiene un sitio para los cuentos aunque eso lo hice antes de pensar todo esto y lo puse un poco alto… por ahora llega de puntillas a cogerlos pero no a ordenarlos de nuevo,
y para su cumple (sí, para su cumple que es en noviembre, que otro de mis grandes defectos es hacer siempre las cosas el último día!) estoy pensando hacerle una cocinita que tenga varios cajones o cestas fáciles de abrir para él y donde pueda guardar todos sus útiles de juego simbólico; comiditas, utensilios de cocina, limpieza, etc.
Como contábamos la semana pasada, hay cenas en casa que nos curramos más y otras que son más improvisadas, más de comida rápida, nunca mejor dicho:
Pero no por eso tenemos que renunciar a que la mesa quede bonita!
Esta vez pusimos un mantel blanco, servilletas de papel con una ramita de hierbabuena encima para el postre y cubiertos de madera desechables; era domingo y mejor que no se nos quedara la casa demasiado empantanada para el día siguiente…
El toque de color lo pusieron unos individuales de ese verde que tanta nos gusta y una maceta muy original que nos regaló nuestra prima Ana,
la que debe ser la lata de tomate más famosa del mundo (un guiño al menú de ese día) con una planta crasa que, por si no os habíais dado cuenta, últimamente están en todos sitios! Y es que además de bonitas necesitan pocos cuidados 😉
Y como nos pedísteis que contáramos el menú de las cenas, éste fue el más fácil de todos, perritos calientes DIY y mojitos de sandía! Yo no soy muy de mojitos pero estos estaban muy ricos, así que el próximo día os traeremos la receta.
Empiezan las CENAS DE VERANO
Menos mal que enciendo el ordenandor después de una siesta (a las 12 de la mañana aprovechando la de Carlos), me encuentro estas fotos y, de repente, me animo:
Si aún tengo muchas cosas que enseñaros! Y me entran ganas de volver a hacer cenas en casa, ahora que viene una época que me encanta para aprovechar el jardín y, además este año, tenemos porche!
Definitivamente hay que inagurarlo, tenemos muchas invitaciones pendientes…
Voy retocando las fotos (muy malas y muy oscuras, sí, pero es que entre que no sé hacer fotos de noche, no me gusta el flash y que cuando hago una cena en casa al final siempre me entran las prisas y le dedico 3 minutos escasos al «reportaje»… ),
y me voy animando. Y voy apuntando la lista de gente a la que quiero invitar (T. L. tranqui que tú estás el primero!) para cuadrar fechas,
Menos mal que aún tengo cosillas del año pasado sin publicar ;)! Esta cena fue un poco más formal pero pronto os enseño otra más divertida y que se prepara en un momento.
Aquí, como aún no habíamos ahorrado para el porche usamos unos muebles que heredamos de nuestra casera y que este año hemos vuelto a encolar a ver si dan unos cuantos veranos más.
Los 2 cajones del escaparate de Springfield, una mesita vieja de mi madre; telas antiguas, velas y nuestras luces de verbena,
Hace ya unas semanas que hicimos esta manualidad, pero hemos estado esperando a ver si conseguíamos alguna foto con los pajaritos comiendo, y nada, no hay manera!
Al principio Carlos se levantaba cada mañana
llamando a los pajaritos, y vigilaba durante un rato por la ventana,
pero ya el pobre se ha dado por vencido y señala el comedero y dice «pío, pío, no», con cara de pena…
Menos mal que al menos nos lo pasamos bien haciéndolo!
Una botella de plástico que tengais por casa, una cuchara de palo y una bolsa de alpiste (el embudo para echar el aspiste es opcional, como veis, no evitó mucho los derrames…)
Aquí tenéis el resultado!
Al menos él se lo pasó en grande descubriendo hasta dónde había llegado el alpiste 😉
Y aún no perdemos la esperanza de levantarnos algún día y que los pajaritos hayan descubierto nuestro regalo!!
Y vosotros, ¿dejáis que los niños se manchen tanto o lo véis demasiado pequeño para estas cosas?
#losmartesconCarlos; El Bautizo IV
El domingo hizo un año que bautizamos a Carlos y aunque en su día estas fotos no las subimos al blog (podéis recordar los post aquí, aquí y aquí), ayer viéndolas de nuevo me parecieron un recuerdo tan bonito…
Yo no suelo salir en las fotos (más que nada porque normalmente soy la que las hago) pero ese día tuvimos un fotógrafo al que desde luego vamos a tener que contratar más a menudo 😉
Así que hoy, sólo recopilatorio de fotos…
Eso sí, éste fue el rato que mejor se portó porque lo del agua por la cabeza…