Por fin podemos enseñaros las fotos de la Primera Comunión de Bego (sí, nos plantamos allí con la cámara… sin batería! muy mío ;)). Menos mal que nos prestaron una y pudimos hacer unas fotillos de la decoración que hoy os traemos.
La clave de la Primera Comunión era simple: color, mucho color!
Nosotras, que somos más de blanco, elegimos «sólo» 4 colores: azulón, naranja, rosa y verde agua, el que más usamos.
Era mayo, Córdoba, y un jardín, así que juntamos esas premisas con nuestro amor por la madera, y éste fue el resultado:
Pusimos una señal en la entrada de coches para que ningún invitado se perdiese,
un caminito de troncos de ese verde,
y, por supuesto, palés!!
quedaban muy alegres con los geranios del jardín, ¿no?
Los recordatorios los dejamos para otro post, que éste ya va bien cargado de fotos pero os adelantamos que también tenían colores, lunaritos de colores, y como detalle para los niños, preparamos unas bolsitas de gominolas+lunares; ¿qué os parece la combinación?
luego las «tendimos» con cuerdas y pincitas, de uno de los palés:
Y no penséis que fue lo único dulce de la fiesta; aquí tenéis la mesa de «chuches» que le hizo una de sus tías… los niños (y no tan niños) se volvían locos!
Otro día os enseñamos más cosas, mientras,
que tengáis un dulce miércoles
Ummm…