Y bueno, aquí está la piñata de luna (cartón, cinta de doble cara -me dejo el sueldo en cinta de doble cara- papel de seda, cola y chuches, faltaría más)
El tema de la luna es porque a Lucía las 2 cosas q más le gustan, a parte del salmorejo, son los perros y la luna, y de perros ya vamos servidos;
la luna reunía varios requisitos, el primero que a ella le encanta,
el segundo que iba con color azul que me encanta a mí,
me encantan las azulinas que están justo en la época de floración,
y podría usar el mantel que me regaló su bisabuela, ¡hecho x ella!
Además era un tema muy sencillo y vistoso, con un globo grande de esos de 80 cm de diametro bajamos la luna para que cenara con nosotros, y le metimos dentro una tira de lucecitas del árbol de navidad, la verdad es q parecia una luna auténtica!
La tarta, que cocinar es otro de mis hobbies, y me gusta mucho más cocinar dulce que salado, aunque luego me guste más comer salado ¿?
Ahí suelo innovar poco, galletas y chocolate, de toda la vida. Fácil y no falla, es mi tarta preferida y de las únicas que me aseguro que se acaban, porque estoy harta de poner tartas de zanahorias muy ricas que luego prueban la mitad de los adultos y un par de niños.
Además si le pones poca leche al chocolate queda bastante durita y puedes darle la forma que quieras, ésta simplemente la recorté con forma de luna y la cubrí de nata.
Eso sí, el cálculo de estructura no es que fallara, es que refrigerada aguantaba muy bien pero 4 horas de calor acabaron en un desprendimiento de luna a la hora de soplar las velas, pero… yo ya había hecho mis fotitos antes y a los niños les daba bastante igual 😉
Lo demás eran manteles blancos, azulinas por todos lados (gracias, mamá),
Y como las tardes se suelen alargar, perritos calientes: pan, salchichas, cebolla, ketchup, mostaza y mayonesa; 5 min de preparación, cada uno se montaba el suyo y se gastaron 80, OCHENTA perritos (había 15 niños/bebés invitados, no más)
Una tarde en el jardín, rodeados de familia y amigos,
y yo que me he propuesto salir un poco más en las fotos para que se acuerden de mí cuando sean mayores 😉
porque este blog también es para ellos, otra forma de conocernos, otra forma de demostrarles todo lo que llenan nuestras vidas.
Fue una tarde estupenda…
… y al final la luna vino, y cenó con ella.