Pero bueno, lo importante es que a Andrés (y a su mamá 😉 ) les gustara su letra luminosa…
Etiqueta: letras
Nuestro moodboard
nuestros ladrillos, no podían faltar, constituyen la cabecera de nuestro
blog y para nosotras se han convertido en imprescindibles; estamos
continuamente en construcción de ideas, de sueños, de ilusiones… Nos gusta la gente que construye y no que destruye.
{1×1}, nuestro logo, nuestro nombre, nuestra identidad. Porque nosotras no vemos la vida la una sin la otra.
Esos gorritos de lana nos gustan por lo que significan, tardes de punto y charlas. Y por los dueños de estos 2 en concreto.
Las velas, que iluminan las noches más oscuras. Los DETALLES.
Y nuestra gran inspiración. Pompones.
Una A gigante.
BLANCO BLANCO BLANCO
Cenas, nubes,
Y ¿sabéis lo que nos ha hecho pensar que realmente hemos
acertado al elegir las cosas que nos inspiran? Cuando
#elhombremasguapodelmundo ha entrado en casa, lo primero que ha dicho:
«vaya, ahí estan todas las cosas que me hacen pensar en ti!»
El taller de los primos
¿Como ha ido el fin de semana? El nuestro muy movidito entre boda, preparativos para nuestro nuevo proyecto, manualidades, etc. Parece que lo de las manualidades es una «enfermedad» familiar, así que hoy os vamos a enseñar las que hicimos el otro día en casa de los primos.
Tienen instrumentos para hacer de todo, pero últimamente les ha dado por las letras, que ya os contamos aquí que nos encantan…
Desde las pequeñitas, de madera,
sueltas o para usar como llavero,
otras forradas de gasa,
¡de hormigón armado!
et voilá! ya tienen sus nombres:
¡Buenos días!
¿¿Qué tal os ha sentado el día de fiesta en mitad de la semana?? A nosotras estupendamente! El martes aprovechamos para ir a la inaguración del nuevo Mercado de la Victoria y la verdad es que nos encantó; tenemos que volver un día con menos gente y la cámara a cuestas para enseñaros todo ;).
Mientras queríamos enseñaros una tienda de decoración que últimamente nos tiene locas, Bel&Soph. Se supone que es de cosas de niños-bebés, pero nosotras ya tenemos fichadas algunas para nuestra habitación.
Sin duda lo que más nos gusta son los cojines; las nubes,
y las estrellas,
y ya si se combinan con nuestra mecedora…
¿Y qué os parece esta mesita?
Aunque seamos más de blanco, algo de este color cae en mi futura casa seguro!
Vale, las demás cosas ya sí son un poco más de niños, pero son tan monas…
Alfombras,
cabeceros,
¡vinilos!
Y por supuesto, la lamparita «de moda»:
¿no os dá gana de decorar una habitación, aunque sea para los invitados ;)?
Por último, para todos los que, como a nosotros, os encanten este tipo de letras gigantes con bombillas, 🙂 🙂 🙂 tenemos un tutorial de cómo hacerlas en casa! Estamos deseando intentarlo…
Venga que sólo quedan 2 días para el fin de semana… (y a algunos, ni eso, GRRR!)
Hasta mañana!
Estábamos pensando que… ya hace mucho que no os enseñamos un hotelito de esos que nos gustan en {1×1}! Y recordando sitios que nos hayan gustado mucho, mucho, mucho y encima recomendable para esta época del año, rescatamos las fotos del viajecito que hicimos en familia por la Provenza.
Nosotros fuimos hace 2 veranos, porque el destino final era la Costa Azul, pero ahora en primavera tiene que ser un gustazo ver los campos de lavanda así:
Como os decía, la Provenza fue sólo una paradita para que el viaje en coche no se hiciese tan pesado pero, aunque sólo estuvimos 2 días, nos encantó!
Teníamos gana de conocer Carcassone, un pueblo medieval amurallado, declarado en 1997 Patrimonio de la Humanidad por la Unesco; tan bonito que haremos un post sólo para esas fotos :).
Hoy toca enseñaros dónde pasamos la noche, en Conques sur Orbiel, una aldeita a 10 min de Carcasonne con un Bed & Breakfast familiar que nos cautivó. Al principio nuestros padres iban un poco desconfiados porque habíamos elegido nosotros el sitio y ya les habíamos avisado que no era un hotel convencional. La llegada por un caminito sin asfaltar y el aspecto de casa de pueblo (sólo tiene 4 habitaciones) hizo que todos dudáramos de la elección mientras aparcábamos el coche…
Sin embargo, una vez que salió el dueño a abrirnos la puerta y nos desbordó con su amabilidad y sus recomendaciones, se pasó el susto! La verdad es que se le notaba que estaba encantado con su trabajo, y eso se agradece mucho.
Y ya cuando nos enseñó nuestras habitaciones…
Las letras gigantes, los bancos y mesillas de madera,
la silla!
hasta las paredes desconchadas nos parecían bonitas 😉
La alfombra,
los colores ;),
¿y qué nos decís de la pared de piedra?
pero sobre todo, sobre todo… cuando llegamos al baño… (emoticono de lágrimas)
¡¡¡¡MI bañera de patas!!!!!
Por si alguien por aquí aún no se ha enterado, ME EN CAN TAN las bañeras de patas!! Yo cuando la ví no necesité nada más para saber que me encantaba estar en ese hotel (lo peor fue que esa habitación les tocó a mis padres, que prefieren la ducha, buaaaaaaa)
También somos fans de los lavabos de cemento pulido y, también los tenían! (y tampoco me tocaron).
Al igual que las habitaciones, las zonas comunes estaban llenas de detalles, con esa decoración mezcla de rústico-diseño-gusto personal de los dueños que llena de personalidad toda la casa.
Antes de acostarnos nos preguntaron para qué hora querríamos que fueran horneando los croissants, ummm!
Croissants calentitos, mantequilla, distintas mermeladas elaboradas por la dueña de la casa, café recién hecho y una larga mesa de madera que invita a alargar también el desayuno… ¿se os ocurre mejor forma de empezar la mañana?
Os dejamos con las vistas desde nuestra ventana:
«La maison pujol, un estilo, un ambiente, un espíritu»
Feliz martes soñando con futuros viajes…