Es una tarta fácil de hacer, que
queda bonita, a mi hermana (y a mucha gente que en principio no es muy
aficionada a las zanahorias) le encanta y encima, nos permitía
aprovechar nuestra última fase de la cosecha del huerto de invierno…
¿Os acordáis
lo bonito que estaba ?
Pues un día, cuando estaba lavando un poco de rúcula para la ensalada,
descubrí unas larvas pequeñitas en algunas hojas y en 2 días que estuve
mala sin poder ir a buscar algún remedio, de repente el huerto había
desaparecido! Unos gusanos gordos, verdes fosforecente, asquerosos, lo
habían devorado entero; menos mal que quedaba poco por cosechar!
Lo único que se salvó fue el orégano y las zanahorias y éstas no sabemos si fue falta de riego, que no les
gustó el sitio o que era una variedad de poco crecer, jeje, el caso es
que no crecían, no crecían y ya tuvimos que recogerlas así; Y yo que pensaba hacerle la papilla a Carlitos con la cosecha de zanahorias…
Al menos les dimos un final muy honroso, decorando la tarta de cumple:
Le daban el toque, eh? 😉
Si os ha entrado gana de probar la tarta, aquí va la receta:
Ingredientes:
Mezclamos en un bol la mantequilla
derretida, las especias, la zanahoria picada, el azúcar y los huevos.
Batimos bien y añadimos harina, levadura y sal. Cuando esté bien
mezclado, las cucharadas de leche y terminamos de batir.
Lo ponemos en un molde, para
estas cantidades no muy grande, de unos 20cm de diámetro, y la metemos
en el horno a 170 grados aproximadamente 1 hora.
Dejamos enfriar y mientras, batimos los ingredientes de la crema de queso durante unos 3 minutos.
Cortamos el bizcocho
longitudinalmente para rellenarlo con la mitad de la crema y usamos la
otra mitad para cubrirlo. Reservar unas horas en la nevera para que se
endurezca la crema y, si tenéis zanahorias enanas, decorar :P!
y la verdad es que estaba bastante buena;
Y a vosotros, os gusta la tarta de zanahoria?