Como ayer os contábamos nuestro fin de semana de primos, hoy os traemos algunas fotos de lo bien que lo pasamos,
y aprovechamos para enseñaros un par de «accesorios» que nos están resultando muy prácticos con el enano
Uno de ellos son los «gatones», una especie de peto con tirantes y pies incluidos, que se pone encima de la ropa y los zapatos y permite que el gateador explore y se arrastre por cualquier sitio,
se dedique a pintar en la tierra,
¡o a meterse en una vasija!
protegiendo su ropa de una muerte prematura asegurada. Los originales, que nos los regalaron cuando Carlitos nació, la verdad es que son mucho mejores que estos, vienen reforzados en las rodillas y con textura antideslizante en las suelas; los que nos sigáis en IG seguro que se los habéis visto muchas veces, así como en algún que otro post. Lo que pasa es que el enano está tan perezoso en eso de soltarse a andar que los originales, además de tenerlos ya destrozados, no le caben!
Y lo otro que os íbamos a enseñar es nuestra mochila Ergobaby, de la que sólo os diré que soy capaz de «cargarla» durante un paseo bastante largo y vosotros mismos podéis juzgar si Carlos iba cómodo ahí arriba, muy atento todo el camino buscando lobos hasta que se quedó fritito!
Ese fue el momento que aprovechamos para planificar lo de las casitas 😉
y para que los demás hicieran un rato el tonto mientras yo les hacía fotos…
Y allí fue donde hice MI FOTO PREFERIDA del fin de semana y creo que de mucho tiempo más!
No sé si dedicarle un post sólo a esta foto y a todo lo que me transmite de esa relación sobri-madrina; creo que me lo voy a pensar 😉
En fin, que fue un fin de semana muy completito, hasta concurso de tiro al blanco y cata de cervezas hicimos, aunque eso ya os lo cuenta mi hermana otro día,
Desde aquí aprovechamos para darle las GRACIAS los anfitriones y a la dueña de la casa,
y decirles que se repita pronto ;)!!