Los que estéis más familiarizados con las redes sociales no hay duda de que sabréis de qué estamos hablando pero habrá quién aún no haya oido hablar de periscope (quién lea periscope y crea que estamos hablando de uno de esos chismes que utilizaban los submarinos para ver por encima del agua no va muy desencaminado…)
Autor: Ana Tortosa
Hoy, con el permiso de esta mamá, compartimos una carta que ha escrito al mundo…
Y que estoy segura, que a muchas de vosotras, os pasa…De hecho hoy, una buena amiga, se incorporaba a trabajar, después de casi 7 meses con su niña, gracias a una pequeña excedencia, y ojalá hubiera podido ser mucho más tiempo…
En breve empiezo a trabajar, dejando a un bebé de 5 meses y 13 días en una guardería (8 horas). Una guardería privada ya que me ha sido imposible hacerme con plaza en ninguna otra. Algo que no sabía hasta que entré en el mundo de la «escolarización» que si no hay cupo no cogen a tu hijo y te tienes que buscar la vida de otra forma.
Tengo la suerte de haber podido disfrutar de él un mes y medio más de lo que una baja por maternidad te ofrece (ya que pude juntarme las vacaciones), cuando hay tantas madres que terminan su baja y su bebé no tiene ni tan solo 4 meses.
No suelo escribir sobre mi vida en las redes sociales pero he tenido la necesidad de quejarme, quiero hacer una denuncia a este país que no da prioridad a cosas tan importantes como el cuidado de un hijo, las necesidades de un bebé. Una personita totalmente dependiente, una personita que necesita de los abrazos de papá, los besos de mamá y cariño las 24 horas del día. Por no hablar de sus tomas, del derecho que tenemos mi hijo y yo a seguir con la lactancia materna y que ahora nos obligan a abandonar.
Voy a dejar a mi hijo en un lugar diferente, con una señora desconocida y otros niños mayores. Él busca a sus padres cuando se asusta, usa el pecho para dormir, comer, relajarse, jugar… Quiere mis brazos cuando esta cansado, por no hablar del amor que le ofrecemos y ahora vamos a cortar de golpe esta relación que nos unía.
Una guardería que por ley «solo» lo pueden tener 8 horas (y digo «solo» porque me parece una bestialidad de tiempo) pero yo, al igual que la mayoría de los españoles trabajamos de 10 horas en adelante… Por lo que se supone que después de la guarde tengo que buscarle una niñera. Alguien que lo vea crecer, decir sus primeras palabras, sus primeros pasitos… Una desconocida que viva su vida! Por qué su mamá esta dedicando la suya a trabajar.
Y mamá quien será? Esa señora que llega por la noche a casa y que lo baña, le da la cena y lo acuesta. Por no hablar de papá, que tiene que dormir fuera de casa dos veces por semana. Es tan indignante y tan injusto, me están obligando a dejar la lactancia y me están privando de ver a mi hijo crecer.
Los pediatras aconsejan no llevar a menores de un año a la guardería, la OMS que le des leche materna exclusivamente hasta los 6 meses, mi trabajo que cumpla un extra de horas y me dedique al 100% a cumplir objetivos y asistir a reuniones a deshoras, pero a nadie le importa lo que quiere mi hijo ni lo que es bueno para él.
No todos podemos hacer como la diputada de podemos y llevarnos a nuestros bebes al trabajo. Pero esta claro que para ellos el mejor lugar es en brazos de mamá.
Por favor, nuestros hijos necesitan una baja maternal superior y una conciliación laboral de verdad. Es necesario un cambio en este sentido y muy triste que se tenga que suplicar algo tan humano y verdaderamente importante como el derecho de pasar tiempo con nuestros hijos.
#losmartescon2
El otro día revisando los borradores del blog, esas cosas que a veces en un momento de inspiración escribes y luego no ves el momento de publicar, me encontrá esta reflexión de hace más de un año…
¿Como será tener varios hijos? ¿se quiere a todos por igual?
A veces lo pienso…
Nosotros tenemos 2 pero en circunstacias tan diferentes que los sentimientos no se pueden comparar, no debe ser igual que tener a los dos (o los que sean) contigo…
Una amiga (y seguidora del blog) me dijo una vez algo que me gustó mucho pero no recuerdo bien, algo como que cuando tienes el segundo hijo el cariño no lo divides entre los dos, sino que el corazón se te hace el doble de grande para poder querer a los 2 lo mismo. Precioso. Yo creo que es así.
Sin embargo, hablaba con otra amiga y casualmente también seguidora (que no todas las amigas lo son ;)) que que los quieras igual no significa que los trates igual, en parte porque ellos son diferentes y necesitan cosas distintas y en parte, y es a lo que voy, porque tampoco es igual la afinidad con todos ellos. Una cosa es quererlos muchísimo, no creo que no se pueda querer a un hijo, y otra tener afinidad, llevarse más o menos bien, compartir formas de ser, de pensar, de hablar las cosas, caerse más o menos bien, llámalo X.
Por eso quizás unos hijos se sienten «más queridos » que otros, aunque yo no creo que sea así.
En mi caso concreto mis padres, los 2, hablan mejor con mi hermana, porque es una persona más calmada, más sensata en -algunos de- sus planteamientos, negocia mejor, no se exalta tanto como yo. SÉ que no la quieren más por ello.
Debe ser duro pensar que tus padres te quieren menos que a tus hermanos, duro crecer así, y explica muchas cosas…
¿son los padres los que hacen sentir así a algunos hijos? ¿son los hijos que «se imaginan» menos queridos sin que sea real?
Si alguna vez tengo más hijos me gustaría esforzarme para que nunca, nunca, nunca se sientan así. Porque no es algo tan raro de encontrar, y me parece tristísimo.
Un año más tarde sé que lo de que te crezca el corazón es verdad,
y para todo lo demás es pronto, pero sigo con el mismo propósito.
P, al final me inspiraste el post de hoy, aunque no sea la receta de espinacas con bechamel. Creo que esa tendría aún menos interés general 😉
Tomando LAFRESCA
Hoy os vamos a enseñar una silla que me llamó la atención no sólo por su diseño, que me gustó, si no por la idea de rescatar algo tan tradicional en nuestra tierra como las sillas de enea. Y además el nombre también me encantó, LAFRESCA.
Como dicen sus creadores, el uso de la silla tradicional de anea se extendió
durante el s. XIX por toda España. Era habitual encontrarla en casas,
verla en las calles cuando la gente salía a tomar “la fresca” al anochecer en las puertas de sus casas,
en cines, bares, ferias, en tablaos e incluso en iglesias. Era la silla
popular por excelencia, una silla completamente social. Sin embargo, en
la actualidad su uso se ha visto relegado a eventos folklóricos de
carácter temporal por toda Andalucía y a algunos espacios donde aún
perdura tras el paso de los años.
Damián López y Granada Barrero,
dos diseñadores andaluces con gran interés por la relación entre
artesanía y diseño, buscan reactivar la artesanía local y rescatar
oficios que están en peligro de extinción,
El diseño propuesto pretende devolver el peso
social que la silla de enea tuvo antaño. La Fresca refleja el bagaje
histórico de la silla de enea pero ha sido adaptada al contexto y la
sociedad actual. Su forma responde a la interpretación en tres dimensiones del característico asiento de enea, que ahora se modula hasta convertirse también en respaldo y reposabrazos.
Fotografia Marianamluna. |
viernes=INSPIRACIóN
Operación Bodas: De pie o sentados.
Desde este post en el que os hablábamos de las bodas de día y de noche, no habíamos vuelto a hablar de este tema, y será por la edad en la que estamos o por las bodas de nuestras amigas, pero junto con el tema Niños, solemos hablar bastante en nuestro día a día.
Así que seguiremos contándoos por aquí algunas de nuestras opiniones, en post cortitos, fáciles de leer y seguramente los jueves 🙂
Otra duda que nos puede surgir: Boda de pie, tipo cocktail o boda sentados.
Las dos opciones me parecen muy buenas, y a las dos les veo ventajas e inconvenientes.
Por un lado, la cena de pie, me gusta mucho, siempre y cuando haya un rincón o una zona donde poder sentarse a descansar, o por lo menos haya mesas altas y sillas para casi todo el mundo. Muy importante también el trabajo del catering, para llegar a todos los invitados y que nadie se quede con hambre.
Por otro lado, la boda sentados, las mesas vestidas, largas, redondas o incluso cuadradas, con mil estilos de manteles, sillas, y decoración. Aquí puedes elegir ponerlo a tu gusto, darle un toque personal, y aprovechar si quieres para dejar algún detalla a alguna amiga, o para todos los invitados.
Siempre viene bien sentarse un ratito, con los amigos de siempre, con los que hace tiempo no ves, charlar y disfrutar de una buena comida o cena.
Coger fuerzas para lo que viene después.