Como os conté en otro post, hace unos meses estuve unos días de viaje en París y aprovechamos para pasar el día en Disneylandia o como yo decidí llamarlo: Happylandia. El nombre es fácil y la explicación aún más. Allí todo el mundo está feliz. Y por un momento desconectas de la realidad, y entras en un “mundo mágico” donde sólo se respira ilusión y sonrisas. Me encantaba ver a miles de niños emocionados cuando veían a Mickey Mouse o a Pluto!
De alguna forma el día de Reyes me ha recordado a Disneyland. La ilusión y los nervios de los niños la noche de antes, la cabalgata (de la que os hablaré más abajo) y volver un poco a la época en la que éramos enanos. Además los Reyes Magos me han traído una camiseta que me ha encantado con una frase que el año pasado fue de las frases más repetidas en casa: DON’T GROW UP, IT’S A TRAP” Peter Pan. Y ahora de vez en cuando se lo digo a Carlitos cuando lo veo ahí en los brazos de su Mami tan calentito y tan bien… y por supuesto que algún día lo llevaré a Happylandia! J
Creo que he disfrutado más este año, con 28 años que cuando fui con 18. Allí da igual la edad, cuando ves a Simba saltando o a Blancanieves, es inevitable emocionarte y recordar lo bonito que fué ser un niño…
Ahora todos esos personajes de Disney se han perdido un poco y he podido ver en las cartas a los Reyes de mis primos pequeños como pedían a una tal Peppa pig, Pocoyó o el mismísimo Sr Bob Esponja. La mitad no tenía ni idea de quiénes eran. Por no hablar de la famosa y Top Ventas Monster High. Lo siento, yo soy más de El Rey León y Aladín. 😉
Y lo mismo pasó con la Cabalgata de Reyes, después de haber visto la cabalgata de Disneylandia, con carrozas gigantes, bien hechas y con todos los personajes de Disney, pues la verdad que la de los Reyes me ha decepcionado un poco…
Y para despedir el día, antes de cerrar el parque, hacen un espectáculo de luces y sonidos en el palacio…se me saltaron las lágrimas al escuchar la primera canción, esa tan bonita de Peter Pan de: Aquella estrella de allá… Así que da igual la edad que tengas, si tienes la suerte de ir allí, la emoción y la felicidad están aseguradas 🙂
Y un pequeño mensaje a todos los padres del mundo, por favor, no dejéis de ver las pelis de Disney con vuestros niños… Porque esas películas, nunca se olvidan…