El tiempo este fin de semana no ha dejado hacer muchos planes al aire libre, así que estrenando cocina nueva, y casi instaladas ya, hemos hecho una receta que nos hacía nuestra madre cuando éramos pequeñas y nos encantaba. Es tan fácil que a vosotros también os encantará y no volveréis a comprar masa de pizza congelada! Además se hace con ingredientes que todo el mundo suele tener en casa…
Mi consejo después de hacerla varias veces: Primero meter la masa en el horno para que se haga un poquito, y después añadir los ingredientes y hornear hasta que esté crujiente.
Y aquí os lo enseño en imágenes, y si lo acompañáis con una copita de vino, en nuestro caso, rosado, sabe mejor!
Una vez tengamos la masa lista, hacemos la forma que nos apetezca. Nosotros hicimos 4 redondas y pequeñitas para hacer de diferentes sabores, y con la masa que nos sobró, hicimos una cuadrada bien grande 😉
Y después de 15 minutitos en el horno… LISTAS PARA COMER!
BON APÉTIT!