Aunque este año ni siquiera esté haciendo frío, hoy os traemos un poco de inspiración para una merienda de invierno en casa,
Ideal para uno de esos días en los que el viento agita los árboles y, por qué no, si vivís en otras latitudes, la nieve se disfruta a través desde el otro lado del cristal:
Sólo necesitamos un mantel de lino, unas ramas de pino y un puñado de amigos;
Hornear unas pastas,recuperar una bobina de cuerda de un restaurante de Barcelona que nos encanta, sacar las servilletas que nos hizo abuela ;),
unos cubiertos antiguos, velas,