Categorías
Unaporuna

Un mensaje especial, para una boda inolvidable.

Como decía ayer una amiga, a partir del mes de Mayo, facebook parece un Especial Telva Novias. Y cuánta razón! 

De hecho este fin de semana a mi me coincidían 2 bodas de 2 amigas. Y además en ciudades diferentes por lo que a una no pude ir. La otra, era de una amiga desde hace muchísimos años, de la playa, que aunque solo nos veíamos de verano en verano, era tan intensa la relación y la amistad, que todas las amigas fuimos testigos de su boda y no pudimos evitar la emoción durante toda la boda.

Uno de los momentos más emocionantes, además de cuando la vimos entrar en la iglesia, fue cuando una de sus primas, leyó unos consejos departe de su padre. Quería compartirlo con todos vosotros, porque está escrito con muchísimo cariño, porque se puede aplicar a todos los matrimonios que estén empezando, o que lleven juntos muchos años y porque aunque yo no me haya casado, creo que es muy importante tenerlos en cuenta…

Un matrimonio feliz, es una larga conversación que debe parecer siempre demasiado corta.
El amor abre el paréntesis, el vuestro contiene muchas experiencias y vivencias que os han hecho conoceros bien, el matrimonio lo cierra.
El matrimonio debe combatir sin descanso a un monstruo que todo lo devora: la costumbre.
No quiere nuestra lengua que, de casado a cansado no haya más que una letra de diferencia.
Si, en algún momento, no se puede cruzar una puerta, deberéis buscar otra o hacer otra puerta. Algo maravilloso vendrá, no importa lo oscuro que esté el presente.
Debéis tener en cuenta que casarse significa perder la mitad de los derechos propios y doblar los deberes.
El éxito, en el matrimonio también, no se mide por la posición  que podáis alcanzar en la vida, sino por todos aquellos obstáculos que se pueden interponer mientras tratáis de conseguir el éxito.
Tened siempre presente que la vida es de una forma distinta para cada uno de nosotros, pero todos buscamos la felicidad en ella. Es un conjunto de experiencias para disfrutar, no para sobrevivir. Nunca guardéis nada para una ocasión especial, cada día que vivimos es una ocasión especial.
Abrid los brazos al cambio, que, como buenas personas que sois y con todo lo que, sin pretender enseñaros, habéis aprendido, nunca perdáis los valores que poseéis.
No esperéis que la luz del destino ilumine vuestra vida, iluminadla vosotros.
No desesperéis nunca, ni muy rápido, ni muy lento, todo requiere su tiempo.
No midáis vuestra riqueza por los bienes materiales que tenéis o podéis conseguir, hacedlo por aquellas cosas que no cambiaríais por dinero.
Ya no os doy más consejos. Ya formáis una pareja y constituís el principio de una familia propia, no olvidéis, estoy seguro que no, a éstas a las que habéis y seguís perteneciendo.

Pues esperamos que los tengáis siempre muy presentes y que de verdad, seáis muy felices!